Jueves, Abril 24, 2025
Inicio > Articulos > Fin de semana de tres días. La revolucionaria propuesta de la Reforma Laboral.

Fin de semana de tres días. La revolucionaria propuesta de la Reforma Laboral.

Casi todos pensamos alguna vez, entre bostezo y bostezo, que era necesario agregarle un día al fin de semana para descansar. Este deseo, casi siempre reprimido por infantil o irreal, podría ahora transformarse en una realidad para muchos trabajadores del país.

 

Fuente: La Hora. 17 de enero de 2017. Por Carlos Fuentealba

Esto porque desde el primero de abril de 2017, entra en vigencia la ley 20.940 que moderniza las relaciones laborales, más conocida como reforma laboral. En ella, uno de sus artículos entrega la posibilidad de llegar a un común acuerdo entre sindicatos y empleadores para distribuir la jornada laboral en cuatro días semanales.

El artículo que lo permite es el 375, que se refiere a “la distribución de las jornadas de trabajo”. En él se señala que “las partes podrán acordar que la jornada ordinaria semanal de trabajo se distribuya en cuatro días”. Esto, sin embargo, no quiere decir que se trabajará menos, ya que lo que se deberá hacer será distribuir las mismas horas semanales en menos días. Al respecto, la normativa señala que “la jornada no podrá exceder de doce horas diarias de trabajo efectivo, incluidas la jornada ordinaria, extraordinaria y los descansos”.

De esta forma, según explica el director del Trabajo, Christian Melis, “con la nueva modalidad podrías tener cuatro días de trabajo en los que, como máximo, se podría llegar a las doce horas diarias. Eso supone que podrías trabajar tres días a doce y el cuarto a nueve, o los cuatro días a once horas y cuarto”.

La modalidad la deberán acordar las partes, con el requisito de que esté constituido un sindicato y éste represente por lo menos a un 30% del personal contratado. “Los objetivos son que los trabajadores puedan disponer de una mayor cantidad de días de descanso en la semana y las empresas puedan ordenar de mejor manera sus turnos y coberturas, para así aumentar su productividad”, explica Melis.

La medida es vista aún con escepticismo desde la Central Unitaria de Trabajadores, donde su secretario general, Nolberto Díaz, asegura que les hubiese gustado “discutir la reducción de la jornada laboral, antes que la redistribución de ésta. Bajar a cuarenta horas es lo que a mí me parecería saludable. Ahora bien, si los sindicatos están de acuerdo en algunos lugares y los trabajadores están dispuestos a este cambio, para nosotros será bienvenido”.

Desde la Dirección del Trabajo explican que esta modificación no está pensada para todos los trabajadores, sino para aquellos que estén dispuestos a asumir una sobrecarga para tener más días libres. Se puede dar también el caso de que la modificación recorte el presupuesto de trabajadores que contemplan el pago de horas extra en sus remuneraciones mensuales. “Por eso es importante que los trabajadores estén sindicalizados y se aseguren de que sus organizaciones sean representativas. La idea es que cada realidad pueda decir si le conviene acoger esta modalidad o no”, explica Melis.